El Museo de Guadalajara, en la ciudad del mismo nombre, abrió sus puertas al público en el año 1838 en el histórico Palacio de Antonio de Mendoza. A lo largo de los años ha ocupado distintos emplazamientos, hasta que en 1973 se trasladó definitivamente al Palacio del Infantado. Es el museo provincial más antiguo de cuantos existen en España y sus colecciones abarcan pintura, escultura, restos arqueológicos y etnográficos.
La exposición permanente “Tránsitos” presenta las obras más relevantes del museo agrupadas en tres grupos. Así, la sección de Bellas Artes cuenta con más de 200 obras de pintura y escultura desde el siglo XV hasta la actualidad. La sección de Arqueología reúne las piezas procedentes de las excavaciones arqueológicas de la provincia, y la sección de Etnografía recoge los objetos relacionados con las costumbres populares de la provincia, como máscaras, castañuelas o ruecas para hilar, formando una colección única sobre las tradiciones y la forma de vida del pueblo alcarreño.
El sello se ilustra con una yesería y un vaso, ambos decorados, una escultura femenina de época romana, siglo II, y la fachada principal del museo.