Duodécimo diseño original de Antonio Mingote. Corresponde la primera parte de la historia del ingenioso hidalgo.
La escena transcurre en una venta mientras don Quijote y Sancho descansan en sus habitaciones.
Al momento se escuchó un fuerte alboroto y apareció Sancho saliendo de la habitación de don Quijote que gritando pedía que le ayudaran, pues su señor estaba luchando contra el gigante Pandafilando. Cuando todos entraron en el aposento comprobaron que don Quijote se encontraba en camisa con la espada en el brazo y estaba combatiendo contra los cueros de vino que se encontraban en la habitación. El ventero saltó sobre don Quijote y le llenó de puñetazos.
Con este diseño se hizo un sello en el 1998, apareciendo en el primer minipliego. Se trataba de una serie episcolar escolar, con la que se pretendía enseñar en las escuelas el método para enviar cartas.